La multinacional asiática Olam International, propietaria de la cafetera palentina Seda Solubles, ha planteado este martes al Comité Intercentros un despido colectivo para 73 trabajadores de las plantas productivas de Palencia y Villamuriel de Cerrato, y las oficinas de Madrid, donde se concentran en total 300 empleos, de los que 34 serían de la planta de envasado de Villamuriel y otros 25 del centro de Palencia, que es el que cuenta con mayor cifra de empleados, unos 225. El grupo alimentario con sede en Singapur, que compró en noviembre por 38 millones las instalaciones palentinas, asumió una deuda de 145 millones que deberá ir abonando cuando se ratifique el convenio de acreedores.

Según informaron a Ical fuentes sindicales, en el documento presentado este martes por dos abogados de un despacho laboralista especializado contratado por Olam se incluye además una propuesta de movilidad geográfica desde Madrid a Palencia para el personal que no sea despedido en las oficinas comerciales, junto a un cambio en las actuales condiciones de trabajo, con rebajas salariales no inferiores a un diez por ciento para los trabagadores.

En la reunión  que se prolongó por espacio de tres horas y media, estuvieron presentes dos directivas de Seda, dos abogados en representación de Olam, dos asesores jurídicos sindicales y los integrantes del Comité Intercentros que pertenecen CCOO, UGT y CGT.  Los trabajadores van a ser informados por la tarde sobre la propuesta hecha a los sindicatos, que mantendrán sucesivos encuentros de negociación con la representación empresarial desde el próximo martes y que no se prevé que finalicen antes de mayo para poder alcanzar un acuerdo.

La próxima semana se iniciará un periodo de consultas entre la empresa y el Comité Intercentros que se prevé duro. Los sindicatos pretenden que se minimice el efecto de la propuesta de despido colectivo ya que consideran excesiva la cifra planteada por Olam. “La situación de producción de la fábrica puede que no sea la mejor actualmente, pero hay que negociar y ver todas las posibilidades. Está claro que se pueden aplicar medidas menos traúmaticas que los despidos con prejubilaciones y bajas incentivadas”, apuntaron fuentes sindicales.