Barack Obama ha volcado toda su energía en hacer un llamamiento a los demócratas para que acudan a las urnas.
El miedo del Presidente de Estados Unidos es que parte de los que le votaron hace 2 años no lo hagan ahora, decepcionados por la crisis económica. Por eso ha llamado a sus caras más populares para que animen a votar los desencantados de la política.
Los republicanos intentan llegar a los ciudadanos con un mensaje que apuesta por castigar las acciones que hasta ahora ha hecho el Gobierno.
Estas elecciones de mitad de mandato son las que evalúan la gestión presidencial. Si se produjera un gran cambio en la Cámara de Representantes, el partido en el poder puede ver frenadas algunas de sus iniciativas al no tener el apoyo suficiente.
Las urnas medirán también la influencia real del Tea Party, el movimiento ultraconservador que ya ha conseguido su objetivo de hacer ruido para darse a conocer y que amenaza con bloquear los proyectos del presidente.