CRÍTICA José S. ISBERT

'Cuando te encuentre'

  • 'Sí, sí, sí, os lo aseguro: la he visto entera sin dormirme, aunque mirando el reloj de vez en cuando'

José S. ISBERT / rtvcyl

FICHA TÉCNICA

  • Película: Cuando te encuentre.
  • Título original: The lucky one.
  • Dirección: Scott Hicks.
  • País: USA. Año: 2012.
  • Duración: 101 min.
  • Género: Drama, romance.
  • Interpretación: Zac Efron (Logan), Taylor Schilling (Beth), Blythe Danner (Ellie), Riley Thomas Stewart (Ben), Jay R. Ferguson (Keith).
  • Guión: Will Fetters; basado en la novela de Nicholas Sparks.
  • Producción: Denise Di Novi y Kevin McCormick.
  • Música: Hal Lindes y Mark Isham. Fotografía: Alar Kivilo.
  • Montaje: Scott Gray.
  • Diseño de producción: Barbara Ling.
  • Vestuario: Dayna Pink.
  • Distribuidora: Warner Bros. Pictures International España.
  • Estreno en USA: 20 Abril 2012.
  • Estreno en España: 25 Mayo 2012.

SINOPSIS

Cuando te encuentre nos cuenta la historia de un marine (Zac Efron) que estuvo tres veces en Iraq y al que nunca le sucedió nada malo durante su estancia en dicho país. El joven cree que su buena suerte se debió a que siempre llevaba consigo la fotografía de una mujer a la que ni siquiera conocía, de ahí que se disponga a buscarla tras su regreso a los Estados Unidos.

La CRÍTICA

“Sí, sí, sí, os lo aseguro: la he visto entera sin dormirme, aunque mirando el reloj de vez en cuando. Me gustan las historias de amor, sobre todo las que acaban bien. Tengo algo de Maruja en la mitad sarcástica del cerebelo, fe en el alma humana y en su intrínseca bondad. ¿Estaré loco? Es lo que me dicen muchos...”

La idea de sacar un guión de una novela es pertinente. Sin una buena historia no habrá película que interese. No es el caso de la novela de Sparks, pero eso ya lo sabía antes de ir al cine. Vayamos al grano: me esperaba un melodrama edulcorado y gané mi sueldo hasta saciarme.

¿Reproches? Hay unos cuantos: la excesiva simplicidad del argumento, o de como se asesina una idea interesante. El soldadito valiente que sobrevive a la guerra con la certeza de que un juvenil, angelical y femenino rostro le salvó la vida durante los combates podría aprovecharse. Otros se agarran a una pata de conejo, a una medalla o a una estampa, y los ateos a quien se deje.

Nuestro soldadito regresa a los USA y, naturalmente, desea conocer a la rubia que le salvó el pellejo supositoriamente; nada más lógico y natural. El problema es que los USA son grandes, y nuestro hombre no tiene sus señas. Ningún problema: atravesará el continente a pie con su perro preguntando hasta dar con ella en un pueblecito olvidado. Fácil, no se me había ocurrido. En honor a la verdad debo añadir que fue el soldadito quien preguntaba, no su pastor alemán, precioso por cierto.

Bien, ya tenemos a la parejita reunida. ¡Qué bonito, se me saltan las lágrimas! Naturalmente, el chico no se atreve a confesar a su bella que encontró la foto en el suelo y que la adora. Cuidará a sus perros y reparará el tejado. Lógico... ¡Y aparece el ex marido, que además es el sheriff, con una cara de malo...!

Como comprenderá el respetable, al precintado sheriff no le gusta que un soldadito de muy buen ver pase tanto tiempo junto a la madre de su hijo. Tarde o temprano, la bella y necesitada acabará con las bragas en la copa de un pino, o quizá de un sauce. Y así fue, queridos lectores, por mucho que les sorprenda.

La tragedia final, que os ahorro, nos lleva al paroxismo de lo inverosímil, pero permite que la cinta acabe bien y con un beso entre las hojas de otoño. ¡Qué romántico! Si es que se me cae la baba...

Hablemos de la interpretación; comprendo que Zac Efron esté cachas, guaperas y seductor como pocos, pero no basta para dar matices a un personaje complejo y traumatizado. Ni siquiera sonríe, o llora, imperturbable ante lo que acontece. Eso sí, tiene una mirada tenebrosa que a más de uno/una en Chueca se le caerán las ligas.

Los demás están ajustados, casi tanto como el presupuesto. Taylor Shilling (la de la foto) es la mejor del reparto, seguida de Blythe Danner, en el papel de una abuela demasiado joven o con una nieta crecidita porque le gustan las sopas. Jay R. Ferguson, el ex marido al que le duele la cabeza cuando le empiezan a salir los cuernos, intenta defenderse con valentía en un papel desagradable y hasta casi lo consigue. Quizás si le hubieran dirigido...

El resto es homogéneo en su mediocridad completa, consabido y esperado, "telegrafiado" como decimos en Francia. Zeus, el perro, está estupendo, ladrando con mucha convicción y paseando por el campo. Quizás faltó que también se enamorara de alguna perra cachonda, porque no se comió ni una rosca. ¡Ellos también lo merecen!

¿Conclusión? Me reí bastante mientras os escribía, lo que también se agradece.

He dicho.